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Mientras que para algunos la tercera edad puede significar el momento ideal para dedicarse a uno mismo, para abocarse a las tareas que habían sido postergadas en otra etapa de la vida y aprovechar el tiempo libre para descansar, para otros no resulta tan sencillo encontrarle el lado positivo. Y viven con pesar el proceso de envejecimiento. Los trastornos médicos crónicos, la pérdida de amigos y la incapacidad para realizar actividades que antes se disfrutaban, pueden generar tristeza, baja autoestima y ansiedad, entre otros trastornos que perjudican la vida emocional.

Todos los cambios son necesarios para avanzar, para crecer de múltiples aspectos, para evolucionar.  Lo importante del cambio no es solo hacerlo sino también la actitud con la que los asumimos y el aprendizaje que nos entregan.

La tendencia del ser humano es a escudarse o sentirse seguro en todo aquello que conoce y con lo que está familiarizado. Por tal motivo la mayoría de las veces ve con recelo lo “nuevo” por tratarse de algo que no conoce.  Es más fácil permanecer en la zona de confort y no tomar riesgos.

Pero sin estos riesgos es imposible conocer mejores cosas, mejores circunstancias y mejores condiciones para nuestra vida.  Ahí es donde debe jugar un papel clave la actitud con la que elegimos hacer el cambio, viendo hacia adelante y nunca hacia atrás.

Los cambios son especialmente difíciles de asimilar en las personas adultas mayores porque entra en juego también el sentimiento de que en esta etapa de la vida ya no hay nada nuevo que aprender, no hay interés en experimentar , gana la nostalgia por las cosas del pasado y no hay interés en el futuro.

Para evitarlos y sobre todo poder ayudarlos de manera efectiva es necesario involucrarse de manera positiva en los sentimientos y vivencias de nuestros adultos.

Cultivar las relaciones sociales y realizar actividades placenteras.

La alegría en la vejez también se puede potenciar a través del recuerdo

Seguir marcándose metas, que no tienen que ser grandes proezas, pero sí objetivos que a uno le estimulen y le hagan más agradable la rutina

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